Tarde de lunes en Ciudad Evita y esa certeza de tener que terminar con los 3 puntos porque los de arriba habían ganado (Sarmiento, Colegiales y Brown) y no podíamos darnos el lujo de dejar puntos en el camino, otra vez.
Sin embargo, bastaron un par de minutos de la primera etapa, para conquistar la misma sensación que contra Telmo y Lamadrid: luego de una gran seguidilla ganadora, los muchachos sintieron el trajin y el trámite empezaba a dirimirse entre lo poco que podía generar Chicago y lo poco que proponía el Tano. Tan poco fue lo sucedido en esa primera mitad, que apenas un tiro del Gomito Gomez quedó para destacar.
Pero bueno, se confiaba en el tiron de orejas o la motivación de Mario Franceschini en el entretiempo para salir con otra actitud, a colmar la tarde nublada de situaciones de gol y conquistar alguna. De movida, al minuto nomás, se hizo omnipresente el 10 y 1-0 arriba para empezar a pensar en quedar a 7 y seguir la escalada. Grave error.
Chicago ganaba y se hacía del balon, la defensa estaba sólida, Monllor seguía con la seguridad a flor de piel, sólo había que aprovechar alguna contra. Y hacia ese desarrollo iba el encuentro, salvo que Tus no fue certero en el pase, inició la contraofensiva azzura y Rami no dió el primer baño de humildad. 1-1 y volver a empezar.
Pascutti sorprendió a propios y extraños metiendo un cambio ofensivo y en un abrir y
cerrar de ojos, corner y quedábamos en desventaja después de mucho tiempo (ver vs Brown). Había que rearmarse. Por suerte, cuando Beron estaba para entrar, el que la hizo entrar fue Alfaro a falta de 15 para el cierre y otra vez tablas y la ilusión de conquistar al triunfo. Más aún se resaltaba esta sensación cuando el Tano se qued o con 10.
Pero no ocurrió, transcurrieron los minutos y lo único que conseguimos fue la 10ma amarilla para Lemos y la expulsión para Carboni más un magro empate. Sabor amargo, nuevamente.
Se terminó la yapa, Chicago hilvanó 5 triunfos para ilusionarse y dos empates que lo alejan de la pelea. Todavía nada es imposible, lo que si queda claro es que se vienen dos finales (vs. Comu el sábado y vs. Cole el martes) para terminar la maratón y ahora si, de no conseguir 6 de 6, se termina la esperanza. Pero si lo logramos, todo es posible...y quién te dice que los de arriba no pierden un par de puntos...
Sin embargo, bastaron un par de minutos de la primera etapa, para conquistar la misma sensación que contra Telmo y Lamadrid: luego de una gran seguidilla ganadora, los muchachos sintieron el trajin y el trámite empezaba a dirimirse entre lo poco que podía generar Chicago y lo poco que proponía el Tano. Tan poco fue lo sucedido en esa primera mitad, que apenas un tiro del Gomito Gomez quedó para destacar.
Chicago ganaba y se hacía del balon, la defensa estaba sólida, Monllor seguía con la seguridad a flor de piel, sólo había que aprovechar alguna contra. Y hacia ese desarrollo iba el encuentro, salvo que Tus no fue certero en el pase, inició la contraofensiva azzura y Rami no dió el primer baño de humildad. 1-1 y volver a empezar.
Pascutti sorprendió a propios y extraños metiendo un cambio ofensivo y en un abrir y
Pero no ocurrió, transcurrieron los minutos y lo único que conseguimos fue la 10ma amarilla para Lemos y la expulsión para Carboni más un magro empate. Sabor amargo, nuevamente.
Se terminó la yapa, Chicago hilvanó 5 triunfos para ilusionarse y dos empates que lo alejan de la pelea. Todavía nada es imposible, lo que si queda claro es que se vienen dos finales (vs. Comu el sábado y vs. Cole el martes) para terminar la maratón y ahora si, de no conseguir 6 de 6, se termina la esperanza. Pero si lo logramos, todo es posible...y quién te dice que los de arriba no pierden un par de puntos...
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| Bronca y desazón por otros dos puntos que se escapan. |
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